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Rodrigo Braña ve a mi mamá con pantalones cortos y le pega una patada.

(NORBERTO "Ruso" VEREA, periodista argentino, opinando en 2003, sobre el combativo volante de Quilmes, hoy en Estudiantes de La Plata)

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Quilmes y la fundación incierta


Las evidencias son escasas, las fechas imprecisas y los testimonios inciertos. Existen buenas posibilidades de que los hechos que se dan por ciertos no hayan sido tales, y que el presente aniversario no tenga demasiado sentido. Varias páginas de esta historia permanecerán sumergidas eternamente en las desconocidas aguas del olvido. Pese a todo esto, una ciudad entera celebra en este día los 120 años de existencia de su institución deportiva más importante: el Quilmes Atlético Club.

Cuenta la historia oficial que el 27 de Noviembre de 1887, un pastor anglicano nacido en Sudáfrica bajo el nombre de Joseph Thomas Stevenson puso la piedra fundamental del Quilmes Rover’s Athletic Club, entidad creada para reunir a la enorme colectividad británica instalada en la ciudad. Tanto ingleses como escoceses e irlandeses eran apasionados del por entonces misterioso juego llamado fútbol. Esto provocó que el club se convirtiera en uno de los pioneros en esta actividad destinada a ganarse el amor de las multitudes. Una década después de la fundación, el nombre de la institución cambió por el de Quilmes Cricket Club, que apenas cuatro años más tarde dejaría paso al ya más familiar Quilmes Athletic Club, denominación que fue castellanizada en la década del 50. Hasta aquí lo que los libros sostienen como verídico, lo que sostiene el club. ¿Fue realmente esa la fecha de origen? Difícil saberlo.

Desde hace ya algunos años, varios especialistas en historia de la región se propusieron esclarecer algunas cuestiones referidas a la fundación del Quilmes Atlético Club. Según las investigaciones, existían en la ciudad varias entidades deportivas, pero ninguna de ellas tuvo la continuidad institucional suficiente como para poder ser considerada parte de lo que hoy es el club. Los argumentos son difíciles de explicar, aunque muchos ratifican que ni el Quilmes Club -miembro fundador de la AFA- ni el Quilmes Rover’s AC -partícipe de los primitivos torneos de fútbol- tuvieron algo que ver con la institución que se mantiene hasta la actualidad. Los historiadores señalan que ambos clubes cesaron sus actividades y desaparecieron por completo en 1894 y 1897 respectivamente.

En las investigaciones se afirma que el Quilmes Atlético Club fue realmente fundado el 7 de Noviembre de 1897, diez años después de la fecha que se reconoce. Esto se basa en algunos documentos que indican que Joseph Thomas Stevenson recién se ordenó como presbítero en 1888 y llegó a la Argentina en 1895, por lo que es imposible que haya fundado el club antes. Si bien esas evidencias parecen lo suficientemente precisas como para esclarecer el asunto, hay otros datos imposibles de ignorar que no hacen más que aportar confusión. Se hallaron registros fundacionales del club en los que se expresa que -luego de su liquidación- el Quilmes Rover’s AC dejó un pequeño saldo al recientemente fundado Quilmes Cricket Club. Bajo esta posición, podría decirse que las cosas realmente sucedieron como dice la historia oficial. Es decir, primero se fundó el Rover’s, que más tarde modificó su fisonomía y cambió su nombre por el de Cricket.

¿Puede considerarse que ese pequeño saldo representó una continuidad que indique que se trata del mismo club? Eso quedará a criterio de cada uno. Por lo pronto, todos los Cerveceros estamos de fiesta. 120 años no se cumplen todos los días.

(tomado del excelente blog “Café fútbol”)

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Un sentimiento hecho poesía al Quilmes Atlético Club (Abel Cavagnolo - Argentina)


Mi viejo Quilmes querido
hoy que cumplís ciento diez
estoy con vos, ya lo ves
porque en mi alma no hay olvido.

Con el "cuore" estremecido,
llevándote en mis entrañas
recuerdo tantas campañas
de delirante alborozo
que nos llenaron de gozo
por tan gloriosas hazañas.

Decano del balompié
Quilmes Atlético Club,
la ciudad dice -¡Salud!
aplaudiéndote de pie.

Es un símbolo de fe
tu divisa azul y blanca
y en medio de esa esperanza
mis sueños te consagré.

Cancha de Guido y Sarmiento
aún estás en mi memoria
recordándome la historia
que aletea en mis pensamientos.

Todo se ha llevado el viento:
El progreso no perdona
y lo que más me emociona
es recordar tus tablones
que han perdido sus blasones
para quedar en la "lona".

Fútbol, hockey, natación,
básquet y también raquetas,
cada cual tiene su meta
de consagrarse campeón.

Es clara la situación,
bien limpia la trayectoria
y está orgulloso de gloria
tu azul y blanco pendón.

El tiempo de aquellos días
ha quedado allá en mi infancia,
cuando repleta la cancha
había un solo policía.

El alambrado tenía
del campo a su alrededor
tan solo de un metro de alto
y nada malo ocurría
porque el público tenía
un respeto de señor.

Un galaico uniformado
que la cancha circundaba
dentro del campo rondaba
bien pegado al alambrado.

Las vueltas que se habrá dado
el "botón" en el terreno,
siempre sonriente y sereno
a todos los saludaba,
allí nadie, molestaba
porque el público era bueno.

Si alguno quiere dudar
de mi palabra sincera
hay una buena manera
que lo va a desengañar.
Vaya pues a preguntar
al paladín que yo invoco.
El Sol, diario como pocos
sabe recuerdos guardar
y allí podrán encontrar
de aquel tiempo algunas fotos.

Dejo aquí esta observación
porque quiero retomar
el hilo, que al comenzar
dejé por aclaración
que no ha sido mi intención
desviarme, en realidad
solo fue necesidad
de aclarar mi comentario.
Nunca miento, al contrario
siempre voy con la verdad.

Hoy tenés cancha especial
de metales y hormigón
y siempre mi corazón
te sigue queriendo igual.
Me siento feliz mortal
viendo tus renovaciones,
pero en mis evocaciones,
que adentro llevo guardadas
te juro que me gustaban
aquellos viejos tablones.

Te digo gracias, campeón
en nombre de mi ciudad,
que tengas felicidad
es mi mayor ambición.

Aprovecho la ocasión
con un sentido formal
de mi sentimiento real
que reitero eternamente,
a todos tus dirigentes
un abrazo espiritual.

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