17 de agosto de 2009



Distante, solitario, impasible, el portero famoso es perseguido por las calles por niños en éxtasis. (...) Es el águila solitaria, el hombre misterioso, el último defensor.

(VLADIMIR NABOKOV, recordando a los porteros de su infancia en Rusia en "Habla memoria" -Anagrama-)

No hay comentarios:

Publicar un comentario