Hablar del Celtic de Glasgow es hablar de uno de los símbolos del fútbol escocés, un club con una historia repleta de éxitos deportivos y humanos.
En el año 1887, procedente de la vecina Irlanda, llega a Glasgow un hermano marista, el padre Walfrid. Con él, incluso años antes, habían llegado miles de emigrantes irlandeses que buscaban en Escocia la tierra prometida. Pero la realidad en Glasgow era bien diferente. Junto a la gente rica, feliz... algunos apenas tenían para vivir. El trabajo en la mina, generalmente reservado a los emigrantes irlandeses, era cruel.
El padre Walfrid no podía dejar abandonados a sus compatriotas. Necesitaba encontrar la manera de conseguir dinero para procurar alimentos a las personas más necesitadas. Y el cielo le inspiró. El fútbol acababa de entrar en las costumbres del pueblo británico. ¡Fundaría un club de fútbol! Y el dinero lo repartiría entre la gente menesterosa.
Otro monje, el padre Dorotheus, le ayudó. En 1888 nació el Celtic de Glasgow. Un club con tradición irlandesa y fundado por católicos. Eligió como color del equipo el verde. Y como escudo el trébol, eso sí, para evitar supersticiones, de cuatro hojas. Era la manera de tener siempre en la memoria su origen y el de sus padres: Irlanda.
La elección de los símbolos fue acertada. El trébol de cuatro hojas pronto trajo la suerte al equipo. Dos años después de su fundación ya cosecharía su primer éxito deportivo. Un maravilloso inicio. Ganó la Copa de Escocia de 1890.
El club empezaba a cumplir con creces los objetivos planteados. No sólo triunfaba deportivamente, sino que al mismo tiempo, desarrollaba una importante labor social. Los beneficios eran repartidos entre los más necesitados y, sobre todo, los trabajadores encontraron una sana distracción. Pero el fútbol, como la propia vida, evolucionó. Los dirigentes dejaron de ser los padres católicos que lo fundaron. Cuando el profesionalismo irrumpió en el deporte el Celtic se agarró a él y se constituyó en compañía.
Sin embargo, sus objetivos primitivos no cambiaron. Cada año, de las cuentas del club, una cantidad importante de dinero era destinada a las sociedades de beneficencia. Y no tienen por qué ser escoceses. Grandes obras, como la lucha contra el cáncer, reciben donaciones del Celtic. Un club que no olvida sus orígenes.
Nace la rivalidad
¿Qué sería el fútbol escocés sin la rivalidad entre el Celtic y el Rangers? Dos equipos de una misma ciudad, Glasgow, pero muy diferentes. Incluso en sus orígenes. Mientras que el Rangers fue fundado en 1873 por un grupo de jóvenes protestantes, el Celtic lo fundó un padre católico irlandés.
Dos clubes indisociables en la historia del fútbol escocés. Una rivalidad que desde hace mucho tiempo fue bautizada con el nombre de “Old firm”, por referencia al origen mismo de Glasgow, una ciudad marcada por la doble cultura gaélica y anglosajana. Este nombre, Old firm, significa “vieja empresa”, y se debió a que durante unos años, ambos equipos se aprovecharon de la rivalidad entre ambos para sacarle rentabilidad pues a comienzos de siglo los dirigentes de ambos clubes forzaban la celebración de un tercer partido (desempate) en la temporada para volver a obtener beneficios por la recaudación, ya que estos partidos son los más esperados por los hinchas escoceses.
El primer Celtic-Rangers se disputó meses después de la creación del club verdiblanco. El partido se disputó en el Celtic Park el 28 de Mayo de 1888. Acababa de nacer una de las más fieras rivalidades de la historia del deporte en Escocia. Neil McCalum conseguiría el primer gol de la historia del Celtic. Y los verdiblancos consiguieron su primera victoria contra sus más directos rivales (5-2). Y en el encuentro de revancha, los herederos del padre Walfrid, volvieron a imponerse con comodidad (6-2).
Llegan los éxitos
En el año de 1892 el Celtic gana la Copa de Escocia y al año siguiente gana su primera Liga, durante esas épocas, dominó el campeonato nacional. No obstante, su dominio es interrumpido en el año de 1930 por el Rangers.
El Celtic, pese a contar con grandes jugadores, entre 1945 y 1965, sólo logró adjudicarse un título de Campeón y en 1963 su tradicional rival le arrebataría la Copa de Escocia.
Su momento más importante llegó en el año de 1967 cuando gana la Copa de Europa tras vencer al Inter de Milan 2 a 1. La final se disputó en el Estadio Nacional de Portugal, convirtiéndose en el primer equipo escocés en ganar dicho título. Aquella escuadra estaba liderada por el capitán Billy McNeill y por el entrenador Jock Stein. Todos los jugadores eran originarios de Glasgow y nacieron en un radio de 30 millas alrededor del estadio. Aquel año fue el más exitoso del Celtic proclamándose campeón de Liga, Copa, Copa de la Liga, Copa de Glasgow y Copa de Europa.
Les quedaba un paso más para quedar definitivamente inmortalizados en la historia del fútbol mundial. El titulo europeo les significó el pasaje para disputar la Copa Intercontinental ante el campeón sudamericano. El rival era el Racing Club de Avellaneda, el equipo sensación de Argentina. En los papeles el Celtic era amplio favorito y muchos daban por hecho la obtención del titulo de mayor importancia mundial a nivel clubes. Pero los escoceses no pudieron conquistar la Copa Intercontinental. Luego de vencer por la mínima diferencia en Escocia, el Celtic caería derrotado por dos a uno en Argentina, ante un colmado estadio. El tercer y definitivo partido se jugaría en Montevideo, Uruguay, en el Estadio Centenario. El encuentro quedaría inmortalizado por el gran gol convertido por el “Chango” Cárdenas. Racing daba el golpe, vencía por uno a cero y se adjudicaba la Intercontiental.
En 1970 el Celtic llegó por segunda vez a la final de la Copa de Europa pero perdió 2-1 ante el Feyenoord. La mayoría de los campeones de 1967 estaban aún en el equipo, muy veteranos todos ellos. Esa es una de las razones que achacan los seguidores a la derrota. Aquella final pasó a la historia por ser el partido de una Copa europea con mayor número de espectadores.
El Celtic vuelve a la final de un torneo internacional en el año 2003 cuando disputa la final de la Copa UEFA, sin embargo pierde la final ante el Oporto de José Mourinho por 3-2 en la prórroga. No obstante, la final fue importante ya que el equipo obtuvo el premio al juego limpio de la FIFA y la UEFA por el comportamiento de los hinchas escoceses (se desplazaron más de 80.000 seguidores.
El Celtic ha conquistado 5 de las 7 últimas ligas, consiguiendo Liga y Copa en 2007 y avanzó a los Octavos de final de la Copa UEFA.
El apodo oficial del club es “Bhoys”. Según la agencia de prensa del Celtic, cuando el club nació, se les llamaba a los jugadores “The Bould Boys” (Los muchachos valientes) por la garra y tesón que demostraban por aquellos años. En una postal de principios del siglo XX se lee "The Bould Bhoys" (la ‘h’ suplementaria refleja el acento irlandés).
Los simpatizantes del Celtic reciben el apodo “Hoops”. Se debe a la forma de las camisetas, con rayas horizontales. Hoops traducido al castellano significa “Aros”. Este apodo data de 1903.
El Celtic juega sus partidos de local en Celtic Park, al que comúnmente se le llama “Parchead”, por el distrito donde está situado, y cuenta con una capacidad para 60.832 espectadores.
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LOS MUCHACHOS VALIENTES - Celtic (Escocia)
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