Una vez lo corrí al "Pájaro" Domizi por toda la cancha, no bien terminó un Boca-Newell's. El pendejo empezó a joderme. Y cuando terminó el partido, lo salí a correr. No lo pude agarrar, viste lo que era: una liebre. Pero, ojo, después lo agarré en México, a los dos años. Él en Atlas y yo en el Toluca. Lo quería matar. “No te enojes, somos todos argentinos”, me decía. Qué piola… (BLAS GIUNTA, recordando un "conflicto" con el ex leproso)
Ante los cambios realizados por Blogger, tiempo atrás, y que afectaron la plantilla de este blog hay textos largos que no se mostrarán totalmente. La solución a dicho inconveniente es hacer click en el título del artículo y así se logra que se muestre el resto de la entrada. Muchas gracias y disculpas por la molestia ocasionada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario